Fotos: Agencia de noticias TSS
La Red de Tecnologías Libres para Ciencia y Educación en América Latina (reGOSH) y el Grupo Sensores Comunitarios (CoSensores), organizaron el Encuentro de Herramientas Científicas Libres para el Monitoreo Ambiental y Paticipativo, en el campus de la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM). Estas organizaciones reúnen investigadores en aspectos socioambientales que utilizan herramientas informáticas -hardware y software- libres (*).
Durante casi una semana que comenzó el martes 27 de junio, se realizaron una serie de talleres en los que se enseñó, principalmente a investigadores y estudiantes, a construir diferentes tipos de sensores electrónicos para medir variables del ambiente, como la calidad del aire.
Como parte de las actividades, se instaló un medidor de calidad de aire en la Escuela Técnica de la UNSAM, en José León Suárez, frente al Camino del Buen Ayre. Otro medidor quedó en el campus universitario, lo que permitirá hacer comparaciones con lo que sucede en el Área Geográfica Reconquista (AGR).
En las cercanías de la Coordinación Ecológica Área Metropolitana Sociedad del Estado (CEAMSE), se han desarrollado barrios muy poblados y se estima que el aire que por allí se respira no resulta muy saludable, en hábitats rodeados de basura y de quemas (a ello se refirió Eduardo Verón en el artículo referido al plástico).
Por ejemplo, según se constató en mediciones realizadas en las prácticas de estos talleres, de detección de presencia de partículas contaminantes en el aire, en barrios cercanos a los “rellenos sanitarios” de la CEAMSE, se llegó a picos de 100 microgramos por metro cúbico en el aire. Los máximos recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) son de 45. En cambio, en el sensor instalado en el campus de la UNSAM, el máximo fue de 35, durante el día.
Los sensores de material particulado en aire, también miden temperatura y humedad, porque estas pueden modificar las otras mediciones. En los talleres también se enseñó a ensamblar y soldar un “conductímetro” y un “colorímetro”, que se usan para detectar presencia de contaminantes en el agua. Y un “caudalímetro”, que permite calcular el caudal de agua que circula por un conducto. El sensor se completa con un registrador de datos, para guardar toda esa información. Se utilizan placas electrónicas de bajo costo, y en estándares abiertos de datos (*).
El objetivo de estos talleres -dicen desde la organización- es acompañar a las comunidades que enfrentan problemáticas ambientales, para que cuenten con tecnologías abiertas (*) que les permitan registrar datos sobre contaminación de forma autónoma y veraz.
Esta iniciativa surgió del proyecto “Migrantas en Reconquista”, de la Escuela Interdisciplinaria de Altos Estudios Sociales (IDAES), que busca trabajar con mujeres que migraron hacia los barrios del AGR en el partido de General San Martín. Junto con el instituto de Investigación e Ingeniería Ambiental (3IA), ambos organismos de la UNSAM, contactaron a la organización coSensores.
El investigador Ignacio Borón señaló que no se puede separar el aspecto ambiental del social. Y explicó a la agencia de noticias de la UNSAM, Tecnología Sur-Sur (TSS), que según el tamaño de las partículas son los efectos en el sistema respiratorio. Las más grandes pueden ingresar a través de la nariz, pero son retenidas allí por el sistema respiratorio. Las más chicas, en cambio, pueden llegar a los pulmones, con efectos todavía más graves. Estos sensores permiten medir la concentración de estas partículas y estimar también su tamaño”.
“Vimos la preocupación y el interés de los vecinos por abordar el problema y tratar de resolverlo. Esta herramienta viene a dar un dato numérico para dar cuenta de lo que los vecinos ya saben: que se quema basura y eso afecta el aire que respiran.” dijo Borón. Y agregó: “Ellos están registrando dónde se junta la basura, qué tipo de vegetación hay, cómo están los arroyos y los canales. Son observaciones de base muy importantes, para después poder tomar decisiones”.
(*) Nota de la redacción: Según explican en el sitio WEB oficial de reGOSH: Las tecnologías libres son herramientas utilizadas para producir conocimiento, cuya documentación técnica se publica bajo licencias abiertas. De este modo cualquier persona -con los conocimientos necesarios- puede obtener esa información, estudiarla, modificarla y compartirla. Actualmente las herramientas para hacer ciencia son patentadas: no pueden ser modificadas, inspeccionadas ni personalizadas; son costosas de obtener y mantener, y generalmente sus proveedoras son empresas multinacionales.